Tras mucho tiempo sin hacerlo, hoy he vuelto a llorar. Lo hice en su momento por una persona que no se merece ni una lágrima. Pero esas lágrimas ya se secaron. Las de hoy son distintas. Son lágrimas más dulces; lágrimas de cebolla.
He usado cebolla blanca y no roja, como vengo haciéndolo ultimamente. ¿Será esa la razón de mis sollozos de hoy?
• 250 gr. de berros
• 2 patatas medianas
• 2 cebollas medianas
• 1,25 litros de caldo de verduras
• aceite de oliva
• sal
• pimienta
• nuez moscada
• 10 ml. de nata líquida
Preparación
1. Pelar la cebolla, picarla muy fina y ponerla a pochar a fuego suave en una cazuela con un poco de aceite de oliva.
2. Pelar las patatas, cortarlas en dados y añadirlas a la cazuela, removiendo bien.
3. Añadir el caldo de verduras, sazonar al gusto (sal, pimienta y nuez moscada) y subir el fuego.
4. Cuando llegue al punto de ebullición, añadir los berros, reducir el fuego y seguir la cocción durante aproximadamente 15 minutos.
5. Retirar del fuego y triturar con la batidora.
La receta, tomada del libro de Cocina Vegetariana de Nicola Graimes, incluye 125 ml. de nata. Yo sólo he usado 10 ml. Los justos para darle un ligero sabor.
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