Recuerdo una ocasión en Saint Andrews (Escocia), la cuna del golf. Faltaban pocos días para Navidad, y el día era húmedo, frío y gris. Tras callejear toda la mañana con mi amigo Willie, entramos a comer a un pub. El frío acumulado en el cuerpo invitaba al consumo de un plato contundente y de gran aporte calórico, así que yo pedí un Full English Breakfast, el típico desayuno inglés que sirven durante todo el día.
―¡¡Scottish Breakfast!! ―se apresuró a corregirme Willie―. En Inglaterra desayuno inglés, pero aquí, en Escocia, desayuno escocés.
En esencia se trataba de un típico desayuno inglés, con huevos fritos, bacon, salchichas, tomates, champiñones, baked beans (alubias al horno)... El toque escocés lo daban embutidos como el black pudding (una especie de morcilla) o el haggis.
Y es que cada uno comienza el día de la forma que mejor le parece. Algunos con un desayuno contundente, haciendo suya la máxima de desayunar como un rey. Otros con un café sorbido. Yo soy de los de tostadas con mermeladas variadas; y mi hija Martina es de las de tostadas con tahín. Por eso siempre tenemos en casa un bote de pasta de sésamo, uno de los ingredientes principales de la receta de hoy.
• 2 berenjenas
• 1 diente de ajo
• 1 cucharada de tahín (también llamado tahini o tahina)
• medio limón
• aceite de oliva
• comino
• sal
• pimienta
Preparación
1. Lavar las berenjenas, abrirlas por la mitad y asarlas en el horno a 220ºC durante 40 minutos. ¡Ay, que pena no tener horno de leña!
2. Sacar las berenjenas del horno y dejarlas enfriar unos minutos para poder quitarles bien la piel.
3. Colocar las berenjenas en el vaso de la batidora, junto al diente de ajo pelado, el tahín, el aceite de oliva, el zumo de medio limón, la sal, la pimienta y el comino. Triturar bien.
El resultado es una sabrosa pasta de berenjenas que se sirve fría, como aperitivo o entrante, y acompañada de pan.
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1 comentarios:
hoy mismo haré este estupendo paté.
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